Como dice el viejo adagio, se necesita gastar dinero para ganar dinero. Pero también es verdad que, a la larga, se necesita gastar dinero para ahorrar dinero.
En primero lugar, tienes que preguntarte: “¿Eres una persona proactiva o reactiva?”. Las personas proactivas prefieren abordar los problemas antes de que sucedan, haciendo las cosas a tiempo y cuidando los costos para que todo funcione de forma fluida con la esperanza de que sus esfuerzos eviten problemas que, al final, puedan resultar mucho más caros. Es más frecuente encontrar personas reactivas, que a menudo esperan que haya un problema para abordarlo y no desean gastar dinero que consideran innecesario para el equipamiento del lugar de trabajo. En general, esta mentalidad resulta mucho más cara en el largo plazo.
No es fácil pasar de una estrategia reactiva a una estrategia proactiva. De verdad, obliga a la persona a trabajar de un modo completamente diferente. Es como pasar de estar siempre tirado mirando televisión a comenzar a comer bien y ejercitarse diariamente. Es un cambio importante, pero el resultado vale la pena por muchas razones.
Todos los encargados de las instalaciones quieren que sus equipos funcionen correctamente cuando los necesitan y, al mismo tiempo, que la compañía ahorre dinero. Un plan de mantenimiento preventivo permite que los equipos operen con eficacia y se mejore el resultado, no necesariamente a corto plazo, pero sí a largo plazo, ya que evita reparaciones importantes y costosas. Se considera que el mantenimiento reactivo cuesta a la empresa tres o cuatro veces más que un programa de mantenimiento preventivo.
Existen muchos beneficios en el mantenimiento preventivo y todos dan como resultado un mejor funcionamiento y ahorro de dinero para tu empresa. Estos beneficios incluyen los siguientes:
Ayuda a que los equipos funcionen eficazmente más tiempo.
Ayuda a optimizar la fiabilidad, eficacia, brillo y vida útil de tu proyector.
Puede ser necesario si un componente está en garantía. Por el contrario, un plan reactivo puede anular completamente la garantía (y tengamos en cuenta que tanto las reparaciones reactivas como las preventivas tienen que ser realizadas por un técnico certificado para evitar que se anule la garantía).
Además de los costos de un equipo que no se mantiene de forma adecuada, el tiempo de inactividad de un cine que se encuentra en mantenimiento por una emergencia puede perjudicar seriamente tus márgenes de beneficios. Cada hora y cada día que tu sala esté cerrada representa una pérdida para tu compañía. No solamente no tienes clientes, sino que además tienes empleados inactivos que quieren trabajar y no pueden.Por otra parte, puedes tener que pagar horas extraordinarias a técnicos calificados que deban trabajar los fines de semana o fuera de horario para arreglar un problema o varios problemas que podrían haberse evitado con medidas de mantenimiento preventivo simple y de rutina. Los repuestos que se piden de un día para el otro también son costosos y con las interrupciones actuales en las cadenas de suministro y de distribución, estas entregas pueden demorarse dos o tres días como mínimo.
¿La reputación de tu sala? Claro, si continuamente tienes que realizar mantenimiento de emergencia que afecte tus operaciones diarias, resultará frustrante para tus clientes, que pueden hartarse y llevar el negocio a otros cines que no tengan que colgar continuamente carteles de “Disculpen las molestias” o “Sala cerrada por mantenimiento”.
Un programa de mantenimiento preventivo elimina las interrupciones en la operación o, por lo menos, las reduce a un mínimo razonable.
Aquí es donde puede ayudarte CES+.
“En CES+ conocemos el
valor del mantenimiento preventivo y queremos trabajar con nuestros clientes
para diseñar planes que no sean básicos sino diseñados especialmente según sus
necesidades”, explica (representante de CES+). “Desde el equipamiento hasta el
software, desde el mantenimiento en el sitio hasta el mantenimiento remoto,
podemos ayudar de la manera que resulte más beneficiosa para tu operación
específica”.
Para solicitar información sobre nuestros servicios, equipos y
proyectos, puede comunicarse llamando
al 305.232.8182 o por correo
electrónico a info@ces.plus
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